"¿Qué haría si me quedaran sólo 6 meses de vida? Escribiría más rápido.” Isaac Asimov

sábado, 7 de mayo de 2011

De las Armas y Letras

En el capítulo XXXVII y XXXVIII del primer libro de Don Quijote de la Mancha, el ingenioso Hidalgo, tras la llegada del Cautivo del Argel (por cierto, cabe destacar como suceso de intertextualidad del libro homónimo de Cervantes) y la mora Zoraida, no teme ningún instante, de entregar a sus acompañantes en la cena, un discurso de aquellos. Digo de aquellos porque la categoría de hechos que entona y con la audacia de ello, logra hacer pensar al lector ¿cómo es posible que un hombre que llegue a tales conclusiones, esté con el juicio tan perdido?, debo decir, como simple narrataria de la obra, que sólo Cervantes podría aclarar tal duda.

El discurso, ya muy conocido en el mundo de la literatura, es llamado "De las Armas y Letras". A lo largo del desarrollo de él, el caballero manifiesta la dualidad que hay entre el hombre que profesa la acción militar y quien profesa los estudios jurídicos. Para el Quijote, el ejercicio de las armas es el que demuestra más valor, determinación y valentía, éstas logran mantener la paz entre los hombres, y por mucho que se intente defender las letras, diciendo que sin ellas no se pueden sustentar las armas, ya que las guerras deben someterse a las leyes, ellas no pueden sustentarse sin armas, porque con las armas se defiende las repúblicas.

Otra característica que menciona acerca de esta dualidad, es el pago ingrato que recibe el soldado, destacando que aunque es mayor el trabajo que éste hace, es mucho menor el premio y reconocimiento en comparación al del hombre letrado, que aunque a él le cueste progresar un poco será el doble para el guerrero, quien da siempre todo para el rey tan sólo para recibir la indiferencia.

Se relaciona mucho esta narración con la vida del propio Cervantes, quien usa como vocero al Quijote para explicar la dualidad. Este escritor siendo un hombre de letras, lo deja todo para hacerse soldado, situación que no dura mucho y retorna a las letras. Siendo soldado vivió tantas penurias y desiluciones, que se refugia en las letras, y en eso, ya todos sabemos que el reconocimiento universal que tiene es magnífico con su prosa, poesía y drama.

Y volviendo al discurso, sólo una frase puede sintetizar lo que nuestro Quijote nos trata de comunicar,
"Las armas requieren tanto espíritu como las letras" .



1 comentario:

  1. aahahhaha primero un ensayo ahora esto
    que sigue?



    te quiero loquilla de las letras. :)

    ResponderEliminar